Mira que veo poco la tele, pero fue ver el anuncio y emecé a hacer asociaciones de ideas. Con este gobierno tan antinuclear —de boquilla ya que el cierre de Zorita no es algo preocupante por lo minúsculo de su aportación a la red eléctrica nacional— van y nos colocan en la publicidad de un ministerio que apenas tiene que ver con medio ambiente, una imagen de las chimeneas de refrigeración de lo que probablemente es una central nuclear advirtiendo del efecto invernadero.
No, seguramente es de una central térmica, pero habiendo puesto una imagen de una central térmica claramente distinguible y acto seguido poniendo una imagen de uns chimeneas de refrigeración típicas de centrales nucleares, y además el humo que sale de ellas es sólo vapor, mi asociación de ideas llega ahí, que quieren que parezca una nuclear. De hecho, quizá sea la central térmica de Puentes (As Pontes para el resto del mundo mundial).
¿Me lo parece sólo a mi o están meando fuera del tiesto?
Por hacer un poco de periodismo incendiario vean las mentiras y medias verdades con las que les gusta llenarse la boca a algunos.
La mañana del 16 de Enero me llamaba la atención una entrada en una bitácora de barrapunto: ¿Hacker? ¿Cracker? y entré a leerla. Trataba de que el 20 minutos, de vez en cuando, utiliza el término cracker en lugar de hacker para referirse a las intrusiones en ordenadores.
La noticia en el 20 minutos me parecó curiosa y entré a leerla. Al minuto hice un par de llamadas porque sabía que algo tenía que ver con ella.
Por si alguien no lo sabe o no se habÃa dado cuenta, el mundo necesita la energÃa nuclear, principalmente porque sin ella ahora mismo no podrÃamos generar toda la energÃa eléctrica que necesitamos para cualquier cosa.
Es asÃ, no hace falta darle más vueltas, por mucho que digan los ecologistas o intenten los polÃticos hacerse los progres y demás hoy dÃa el mundo en el que vivimos no serÃa posible sin las centrales nucleares y explicaré básicamente el por qué.